1 de Marzo de 2021
Se abrieron las puertas…
Cuando recién se inició la Pandemia llegaban a los celulares infinidad de mensajes.
Conservé sólo dos. Uno hacía referencia a lo que es el verdadero aislamiento.
Qué sienten quienes están enfermos y no pueden salir del hospital o estar acompañados como necesitan mientras nosotros podemos, a pesar de todo, estar en casa y ellos no pueden volver a la suya.
Otro fue un artículo que se tituló: “Cuando las puertas se abran.
”Ambos vuelven a mi mente y nos proponen reflexionar.
No nos quejemos, podemos aprovechar la experiencia para transformar el dolor o la angustia en aprendizaje de vida.
Estamos frente a la gran oportunidad.
Hoy se abren las puertas de nuestra escuela y debemos preguntarnos:
Si habremos aprendido a buscar el abrazo aunque sea diferente al habitual.
Si sabemos darlo.
Si somos capaces de agradecer por lo que recibimos.
Si aprendimos a valorar el esfuerzo que cada uno hace.
Si seremos capaces de dejar el celular o la pantalla cuando aparecen imágenes sin sentido y aprovechar ese instante para ver el rostro del que conversa conmigo.
Si habremos aprendido que cada maestro en cualquier punto del país hizo y hará lo mejor para que cada niño se sienta contenido y que el médico es un héroe que expone su vida para que nosotros sigamos vivos.
Si habremos aprendido a dejar el ritmo de vida agitado para hacer una pausa y pensar qué perdimos.
Estamos todos juntos ante el gran desafío, hagamos un esfuerzo, sostengamos los valores que nos enaltecen y que la lección de vida la hayamos aprendido no sólo por nosotros sino especialmente por quienes fueron vencidos.
La Dirección